EN LIBACIÓN SOLITARIA

Poemario bebido (más que escrito) en 2014, inédito hasta la luna de hoy; es esta su primera edición (libro electrónico). Y qué mejores días para publicarlo que los de esta pandemia que, como diría el amigo Víctor Alfonso Moreno, nos ha cercenado las frías en noches de viernes o sábado; en mi caso, aquellas de las esquineras tiendas monterianas donde acostumbraba libar en solitario, aunque sumar amistades acabó siendo igualmente espirituoso.

La culpa de este nuevo libraco la tiene Julio Ramón Ribeyro en una de sus “Prosas apátridas”. Cito lo pertinente como epígrafe. Cada letra se fue tomando su traguito, y debo reconocer que no siempre me limité a la dosis que él recomendaba.

Hasta la nota introductoria que escribí tuve que tomármela in situ.

Su mayor riesgo fue una banda de atracadores de tiendas y estaderos que, por esos días y a cualquier hora, despojaban a Raimundo y a su alcohólico mundo de todo lo propio, lo fútil y lo ajeno. Ese es otro negocio que el virus se ha llevado: asaltar en las tiendas a cerveceros anónimos. Todas las peripecias que tuve que hacer para concluirlo se beben en sus páginas.

En fin, un libro más, un peso menos.

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FBA